El libro Balada de pájaros cantores y serpientes (el título es bien largo) es una precuela de la saga de Los juegos del hambre. Se trata de una novela de ciencia ficción escrita por Suzanne Collins, autora de los 3 libros que componen la saga, y que se publicó en 2020. En 2023 se estrenó la película que está basada en el libro, con el mismo nombre (aquí puedes leer mi crítica y la explicación del final de la película).
En el libro se abordan los años posteriores a los conocidos como los Días Oscuros, una rebelión que hicieron los distritos en Panem y que resultó fallida, lo que daría lugar a los famosos Juegos del Hambre, como castigo al pueblo.
Guion del artículo
Resumen y contexto del libro
Balada de pájaros cantores y serpientes se remonta directamente a los décimos Juegos del Hambre, en los que Coriolanus Snow (si has visto la saga sabrás perfectamente quién es) es por primera vez mentor de los juegos a sus 18 años. Snow pertenece a una familia pudiente, famosa y reconocida, pero que en estos momentos vive tiempos complicados debido a la pobreza de la guerra. Por ello, el joven Coriolanus pretende destacar entre los compañeros mentores de los juegos, llevando a cabo una estrategia impecable.
Sin embargo, contra todo pronóstico, le toca ser mentor del peor de los distritos, por ser el más pobre y desolado: el Distrito 12. Así, tendrá que ser el mentor de Lucy Gray Baird, tributo femenino de los juegos.
Principales personajes de la novela
- Coriolanus Snow: es uno de los 24 mentores que nombran para los 10º Juegos del Hambre.
- Lucy Gray Baird: tributo femenino del Distrito 12. Tiene un gran talento como cantante.
- Tigris: es la prima de Coriolanus, que vive con los Snow. Es la más cercana al protagonista y tienen gran complicidad.
- Casca Highbottom: decano de la “Academia” y a quien se le ocurrió la malísima idea de los Juegos del Hambre.
- Volumnia Gaul: Vigilante Jefe de los juegos.
Reseña y opinión de Balada de pájaros cantores y serpientes
El libro me lo leí en un periquete. No suelo ser de esas personas que se leen un libro en 3 días, la verdad, pero en este caso tardé bastante poco en hacerlo, teniendo en cuenta que es un buen libro, de 600 páginas.
Dado que es una precuela de The Hunger Games, no se hace referencia alguna a lo que hayas podido leer en los libros o visto en las películas de la saga. De hecho, aunque Coriolanus Snow sí que aparece en los 3 libros principales, en este caso tiene 18 años, por lo que es un personaje completamente diferente (piensa que se sitúa unos 60 años antes, por lo que Katniss Everdeen o Peeta Mellark no pintan nada aquí).
Entrando en materia con la crítica al libro, en primer lugar me centraré en el personaje de Snow. Para quienes somos fans de la saga (aquí fanática declarada), de entrada el personaje no nos despierta ternura. Sabemos perfectamente cómo es en los 74º Juegos del Hambre como presidente de los mismos, y lo despiadado, cruel y antipático que nos resulta, por lo que de entrada no nos cae bien.
Es cierto que el libro lo intenta, parece que Coriolanus tiene su momento de ternura, de compasión, de incluso amor por la que es la tributo que tiene que preparar, Lucy Gray Baird, pero el punto débil de la historia es que ya sabemos que, por muy bueno que nos lo pinte Suzanne Collins, luego será un ser despiadado.
Esto nos hace ir con pies de plomo y esperar el momento en el que se convierte en esa persona malvada, pero por el momento es verdad que se disfruta la fase de enamoramiento con Lucy, su preocupación por ella y por lo que piensan los demás, su propia familia, los compañeros de la “Academia” y los espectadores.
Quitando esto, el libro es una fantasía, porque nos remonta al universo de Panem y los distritos, y si te gusta la saga, qué mejor que una precuela para saber cómo se fue desarrollando todo hasta la “actualidad” que vimos anteriormente.
En cuanto a los juegos, la arena es un desastre. Puede parecer extraño, teniendo en cuenta que asistimos al décimo año de los juegos en el libro, pero Panem sigue reconstruyendo la ciudad tras la rebelión y el recinto cerrado de los juegos tiene fallas por todos lados. Falta la tecnología propia que acostumbrábamos a ver, los programas comentando todo constantemente, los desfiles y trajes esperpénticos… En definitiva, falta ese famoseo y glamour de los 74º Juegos del Hambre.
Hay que decir que sí que se perciben cosas, atisbos que van quedando guardados y errores que toman como experiencia para ir endureciendo los juegos (y vaya que si los endurecen, eh). Todas estas fallas se aprovechan para intentar boicotear los juegos y salvar a los distintos tributos de los distritos, momento álgido donde los haya.
El final del libro
En el final de los juegos lo pasamos un poco mal, porque el estado de debilidad de la protagonista Lucy Gray Baird nos mantiene en tensión pensando que va a morir. De hecho, el propio Coriolanus está tan nervioso que da por hecho que la tributo, amor de su vida, ha muerto. Sin embargo, consigue salir de todo ello y resulta ser la ganadora de los décimos Juegos del Hambre, gracias a los tejemanejes de Snow.
A partir de aquí el libro nos adentra en el mundo de la protagonista de los juegos, en su faceta de cantante (a diferencia de los juegos posteriores, quien gana no recibe una vida de lujos y vivienda en Panem, sino que vuelve a su distrito de origen); y en la situación de Coriolanus tras su castigo entrando en el ejército. El soldado consigue escaparse en algunas ocasiones para ver a Lucy cantar desde la tarima, espectáculos que la cantante hace junto a su grupo de amigos para obtener algo de dinero y provisiones en el mercado negro. Las canciones que canta Lucy las veremos después en los 74º juegos y es como muy genial (Katniss canta alguna canción también a su hermana para tranquilizarla, que viene del repertorio de Lucy).
En torno al final del libro, el personaje de Sejanus cobra mayor importancia, ya que Coriolanus descubre que está colaborando con los rebeldes. Es en este punto donde vemos cómo la personalidad malvada de Snow se va forjando, ya que el personaje traiciona a su amigo haciendo que se sepa su plan. Aquí entendemos el respeto de Snow a los valores y las normas del Capitolio, que tiene tan presentes en los 74º juegos, pues es capaz de ver cómo cuelgan a su amigo del árbol de ahorcado sabiendo que él ha sido el culpable.
Con todo y con esto, Coriolanus sigue intentando hacer su vida con Lucy, estando dispuesto a escapar con ella cuando ésta le dice que huirá del Distrito 12 intentando encontrar una nueva vida al norte, a lo que él queda con ella en irse. Sin embargo, le comunican que ha superado el examen a la academia de oficiales del ejército, y que lo trasladarán al Distrito 2 por ser uno de los mejores y el más joven en obtener esas notas, lo que le hace dudar.
Finalmente escapa con ella y se alojan en la casa del lago al que Lucy solía pasar los días con su grupo, donde aparecen las armas con las que Coriolanus había encubierto un crimen y que podría costarle su carrera. Así, se da cuenta de que si hace desaparecer las armas, podría vivir una vida de ensueño, pero al mismo tiempo se quedaría el cabo suelto de la posible traición de Lucy. El caso es que en las últimas páginas del libro vemos a un Coriolanus completamente desquiciado, loco, frenético y persiguiendo a Lucy con un arma. En principio su intención no es matarla, pero posteriormente comienza a disparar por todas partes. De hecho, cuando termina el libro no sabemos si Lucy está muerta, si finalmente le alcanzó alguna bala. Solo sabemos que Snow vuelve al campamento para trabajar en su reputación, momento del deterioro del protagonista que lo hará convertirse en todo un psicópata en el futuro.
Snow acaba en el Capitolio, hablando con la doctora Gaul, quien lo tutelará y guiará para ser una figura destacable de Panem. Así es como, con toda esta convergencia de factores y situaciones, podemos entender la formación de la personalidad del futuro presidente, teniendo en cuenta que es también quien envenenó a Highbottom, máximo dirigente de los juegos entonces, por haber ido en su contra y tratarlo mal.
Lo peor y lo mejor
¿Lo peor del libro? No simpatizas tanto con los personajes secundarios: entorno de Snow, otros tributos de los juegos y sus mentores… No siento tanta cercanía como en la saga principal.
¿Lo mejor del libro? Volvemos al entorno de Panem, revivimos una historia de amor entre Lucy y Coriolanus y la tensión de quien quiere salvarla desde fuera de la arena y quien hace todo por sobrevivir e interpretar los pocos mensajes y regalos que le llegan.
Conclusión
Siendo sincera, el libro se me hizo algo más pesado que los 3 principales, pero lo devoré igual. La primera parte te engancha hasta el extremo, la segunda puede que sea algo más floja, lo que hace que pierda fuerza con respecto a sus antecesores. Pero si quitamos la comparación, es un libro que recomiendo leer sin duda, por lo que Suzanne Collins puede sacar libros de cada año de los juegos y no rechistaría en absoluto.
Saber quién y cómo se inventó meter mutos en la arena, quién empezó a innovar en los trajes y los programas de emisión, cómo se pensó meter regalos en los juegos, entender la historia desde el punto de vista de otro mentor, de la vigilante de los juegos, de otro tributo…
Me pierdo, quiero más. ¿Te pasa? Cuéntame en comentarios 🙂
Periodista. Cinéfila que no puede dejar de decir «brutal» cuando alucina con una película, generalmente de esas que dicen que son raras. 📽️